Epilepsia es una afección neurológica definida por la aparición de dos o más crisis epilépticas no provocadas. Una crisis se produce cuando hay un aumento anormal de la actividad eléctrica en el cerebro, causando síntomas que pueden ir de leves a graves. La prevención de las crisis es crucial, ya que cada una de ellas aumenta la probabilidad de que se produzcan en el futuro.

Entender la dieta cetogénica

En dieta cetogénica es una dieta rica en grasas y baja en carbohidratos que cambia la forma en que el cuerpo genera energía. Normalmente, la dieta consiste en aproximadamente 80% de grasa, 15% de proteína y 5% o menos de carbohidratos. Al reducir drásticamente la ingesta de carbohidratos, el cuerpo entra en un estado llamado cetosis, en el que quema grasa para obtener energía en lugar de glucosa.

¿Cómo ayuda la dieta cetogénica con la epilepsia?

Se ha demostrado que la dieta cetogénica ayuda a controlar las convulsiones, especialmente en los casos en que los medicamentos tradicionales no son eficaces. Esto es especialmente importante para las personas con epilepsia resistente al tratamiento. He aquí cómo la dieta cetogénica puede marcar la diferencia:

  1. Aumento de la actividad mitocondrial: La cetosis puede aumentar el número de mitocondrias, las unidades productoras de energía de las células, especialmente en el cerebro. Este aumento de las reservas energéticas hace que las neuronas sean menos propensas a fallar, lo que reduce la probabilidad de convulsiones. Si las neuronas tienen más energía disponible, no necesitan ser tan sensibles a los estímulos, lo que reduce el riesgo de disparos involuntarios.
  2. Aumento de los neurotransmisores inhibitorios: La dieta favorece la producción de GABA, un neurotransmisor inhibidor que ayuda a calmar la actividad neuronal. Al mismo tiempo, reduce los niveles de glutamato, un neurotransmisor excitador que puede desencadenar convulsiones. Las neuronas con más ATP pueden permitirse producir más GABA sin comprometer su funcionalidad.
  3. Reducción de la inflamación: Los estudios han demostrado que la dieta cetogénica reduce los niveles de moléculas inflamatorias en el cerebro, como la interleucina 1 beta. Esta reducción de la inflamación puede ayudar a controlar las convulsiones.

Consejos prácticos para adoptar una dieta cetogénica

La transición a una dieta cetogénica requiere compromiso y paciencia. Aquí tienes algunos consejos que te ayudarán:

  • Comience con el ayuno: Combinar una dieta cetogénica con un ayuno intermitente (16 horas de ayuno) puede ayudar a poner en marcha la cetosis. Durante la primera semana, comience con un ayuno de 12 horas y aumente a un ayuno de 14 horas durante la segunda semana.
  • Alimentos ricos en grasas: Incorpore alimentos ricos en grasas saludables y proteínas y reduzca al mínimo los carbohidratos. Las sardinas, los huevos, la mayoría de las verduras, la mayoría de los frutos secos, la mayoría de las carnes y la mayoría de las bayas son excelentes alimentos ceto. Asegúrese de comprobar el contenido de carbohidratos en la información nutricional. Tenga en cuenta que las fibras solubles e insolubles no cuentan para la cantidad diaria permitida de 30 g de carbohidratos.
  • Controlar la gripe ceto: La fase inicial, conocida como la gripe ceto, puede causar fatiga y hambre mientras su cuerpo se adapta. Mantenerse hidratado y consumir suficientes electrolitos puede ayudar a aliviar estos síntomas. Una pizca de sal con agua durante todo el período de ayuno será suficiente.

El papel de los agonistas del GLP-1

Medicamentos como el Wegovy, que son agonistas del GLP-1, pueden ayudar a que la transición a una dieta cetogénica sea más suave. Estos fármacos reducen el hambre e inhiben la gluconeogénesis (la producción de glucosa a partir de fuentes no azucaradas), lo que facilita el mantenimiento de la cetosis. El momento más difícil del día bajo la dieta cetogénica es aquel en el que se agotan todas las reservas de glucógeno del hígado, pero la cantidad de cetonas apenas empieza a formarse. Los agonistas del GLP-1 reducen esa incómoda ventana de tiempo de transición metabólica.

Conclusión

La dieta cetogénica ofrece una alternativa prometedora para los enfermos de epilepsia, sobre todo cuando los medicamentos tradicionales resultan insuficientes. Al aumentar las reservas de energía del cerebro, potenciar los neurotransmisores inhibidores y reducir la inflamación, esta dieta puede ayudar a controlar los ataques. Aunque la transición puede ser difícil, herramientas como los agonistas del GLP-1 y una planificación adecuada pueden hacerla más llevadera.

Para obtener más consejos y orientación sobre el inicio de una dieta cetogénica, explore otros recursos y consulte a profesionales sanitarios. Adoptar esta dieta puede ofrecer un camino hacia un mejor control de las convulsiones y una mejor calidad de vida.

Existen unas pocas enfermedades metabólicas raras en las que una dieta cetogénica está estrictamente contraindicada; sin embargo, es casi seguro que una persona las conozca desde la infancia, ya que estas enfermedades se detectan muy pronto debido a su grave presentación. Asimismo, un diabético insulinodependiente puede beneficiarse de las cetonas a niveles nutricionales de 1,5-3 mmol, pero estas personas deben controlar regularmente los niveles de glucosa y cetonas en caso de que una infección provoque una cetosis galopante. Las personas insulinodependientes pueden reducir sus necesidades de insulina, pero siempre deben llevar insulina precisamente por el motivo que acabamos de mencionar.

Una última advertencia es que si la dieta cetogénica se utiliza para controlar la epilepsia, es necesario un cumplimiento estricto, mientras que para la mayoría de los demás individuos, el cumplimiento parcial es ciertamente bienvenido.

Principales conclusiones

  • Beneficios de la dieta cetogénica: Eficaz para controlar las convulsiones, especialmente en la epilepsia resistente al tratamiento.
  • Retos iniciales: La transición puede ser dura, pero manejable con las estrategias adecuadas.
  • Medicamentos de apoyo: Los agonistas del GLP-1 pueden facilitar la transición reduciendo el hambre y potenciando la cetosis.

Para más información cómo empezar una dieta cetogénicaSi tiene alguna duda, consulte con profesionales sanitarios y explore guías y consejos detallados.