Según los estudios, perder entre 50 y 100 cabellos al día es normal. Sin embargo, si pierdes más, es posible que ya exista un grave problema de salud subyacente. ¿Podría ser diabetes? La respuesta es sí.

Nuestra clienta Ana siempre había cuidado mucho su salud, controlando diligentemente su niveles de azúcar en sangre y siguiendo las instrucciones de su médico. Sin embargo, Ana empezó a notar un cambio preocupante: su pelo, antes abundante, empezó a debilitarse y a caerse. Preocupada por este inesperado efecto secundario, Ana decidió hablar con su médico sobre la caída del cabello y su posible relación con la diabetes. El médico le explicó que la caída del cabello podía estar relacionada con la diabetes debido a factores como la mala circulación, los desequilibrios hormonales y las deficiencias nutricionales.

Según el dermatólogo Trevor Sandler, "la caída del cabello puede estar asociada a la diabetes, aunque no sea una causa directa. La diabetes puede afectar al sistema circulatorio y al equilibrio hormonal del organismo, lo que puede contribuir a la caída del cabello. Además, los niveles incontrolados de azúcar en sangre y las deficiencias nutricionales, comunes en la diabetes, pueden afectar a la salud de los folículos pilosos." Y añade: "Esta afección puede controlarse con medicación y dieta". 

Conozcamos la relación entre la diabetes y la caída del cabello.

¿Qué es la caída del cabello?

La caída del cabello se refiere a la pérdida parcial o total del pelo de las zonas del cuerpo donde normalmente crece. Puede afectar al cuero cabelludo o a otras partes del cuerpo, como las cejas, las pestañas, la barba o el vello corporal. La caída del cabello se produce de forma gradual o repentina.

El tipo más común de caída del cabello es la alopecia androgenética. Se conoce como calvicie de patrón masculino o femenino y se caracteriza por un adelgazamiento gradual del cabello en el cuero cabelludo. Los hombres experimentan un retroceso de la línea de implantación del cabello, mientras que las mujeres experimentan un ensanchamiento y un adelgazamiento general.

¿Cómo provoca la diabetes la caída del cabello?

He aquí algunas formas en que la diabetes puede contribuir a caída del cabello:

Deterioro de la circulación sanguínea

Los niveles descontrolados de azúcar en sangre pueden dañar y estrechar los vasos sanguíneos. Esto reduce el flujo sanguíneo a varias partes del cuerpo, incluido el cuero cabelludo. Una circulación sanguínea inadecuada afecta al transporte de nutrientes y oxígeno a los folículos pilosos, debilitando el crecimiento del cabello y aumentando su caída.

Desequilibrios hormonales

La diabetes puede provocar desequilibrios hormonales. Las fluctuaciones hormonales, como los andrógenos, pueden contribuir a la caída del cabello. El exceso de andrógenos puede provocar una afección denominada alopecia androgenética, que se caracteriza por la caída del cabello en hombres y mujeres.

Inflamación

La inflamación crónica en pacientes diabéticos puede tener efectos adversos en los folículos pilosos. Puede afectar al ciclo normal de crecimiento del cabello y contribuir a su caída o debilitamiento.

Deficiencias nutricionales

Los pacientes con diabetes son propensos a padecer ciertas carencias nutricionales, como vitaminas del grupo B, vitamina D y hierro. Estos nutrientes son necesarios para el crecimiento del cabello, y su carencia puede contribuir a su caída.

Medicamentos

Algunos medicamentos utilizados para controlar la diabetes pueden provocar la caída del cabello como reacción adversa. Sin embargo, tenga en cuenta que no todos los medicamentos para la diabetes provocan la caída del cabello, y que este efecto secundario es relativamente raro.

¿Cómo tratar la caída del cabello en caso de diabetes?

Nuestra clienta Ana, que nos contó su historia, empezó centrándose en mantener estables sus niveles de azúcar en sangre. Vigilaba y controlaba diligentemente su glucemia con una dieta sana, ejercicio regular y la medicación adecuada. Al mantener su diabetes bajo control, pretendía minimizar cualquier posible impacto en su cabello. Ana también se aseguró de dar prioridad a su salud y bienestar general. Tomó suplementos recomendados por su médico para paliar cualquier carencia de nutrientes que pudiera contribuir a la caída del cabello. Además, incorporó a su dieta alimentos ricos en vitaminas y minerales, como verduras de hoja verde, frutos secos y pescado. Estos cambios no sólo ayudaron a controlar su diabetes, sino que también nutrieron su cabello desde dentro.

Consciente de la importancia de la circulación sanguínea, Ana incorporó los masajes del cuero cabelludo a su rutina diaria. Masajear suavemente el cuero cabelludo estimulaba el flujo sanguíneo y aportaba nutrientes esenciales a los folículos pilosos. Utilizaba aceites naturales, como el de coco o el de oliva, para nutrir el cuero cabelludo durante los masajes y crear un entorno saludable para el crecimiento del cabello. Optaba por champús y acondicionadores suaves, sin productos químicos agresivos, que no eliminaran los aceites naturales ni causaran irritación.

También evitaba el peinado excesivo con calor y optaba por peinados sin calor siempre que era posible, reduciendo así la tensión sobre su ya delicado cabello.

Con un esfuerzo constante, paciencia y un enfoque holístico, Ana consiguió controlar la caída del cabello mientras vivía con diabetes. Su dedicación a su salud general, al control de la glucemia y a las medidas específicas que tomó para cuidar su cabello marcaron una diferencia significativa. No sólo recuperó parte del cabello perdido, sino que se sintió más segura de sí misma y fortalecida en su camino. Compartió su historia con nosotros para inspirar a otras personas que se enfrentan a retos similares.

En resumidas cuentas, la caída del cabello es tratable y se puede recuperar la belleza del cabello con pequeños ajustes en el estilo de vida, una dieta sana y medicamentos. 

Los médicos y expertos sugieren lo siguiente para curar la caída del cabello.

El tratamiento de la caída del cabello en personas con diabetes implica abordar tanto la causa subyacente de la caída del cabello como el control eficaz de la diabetes.

  • Asegúrese de que controla eficazmente su diabetes siguiendo las recomendaciones de su profesional sanitario. Esto incluye mantener estables los niveles de azúcar en sangre mediante una dieta equilibrada, ejercicio regular y el uso adecuado de medicación o insulina.
  • Antes de empezar a tomar cualquier medicamento, consulte a un profesional sanitario para asegurarse de que es adecuado para su enfermedad específica.
  • Asegúrate de llevar una dieta equilibrada con nutrientes esenciales para la salud capilar, como vitaminas y minerales como el hierro y el zinc.
  • También puedes tomar suplementos sin receta para equilibrar tus carencias nutricionales. 
  • Evite los peinados que provocan tracción. Si tienes una caída del cabello relacionada con la diabetes, evita los peinados que ejerzan una tensión o tracción excesiva sobre el cabello, como las coletas apretadas, las trenzas o las extensiones.
  • Trata tu cabello y cuero cabelludo con suavidad para evitar daños mayores. Utiliza champús y acondicionadores. Evite los peinados con calor excesivo o los tratamientos químicos. Utiliza un cepillo o peine de cerdas suaves para evitar la rotura del cabello.