Los perros con diabetes necesitan insulina, además de una dieta adecuada y ejercicio regular, para reducir las altas concentraciones de azúcar en sangre. Controlar las cantidades de azúcar en sangre es importante porque puede reducir el riesgo de que las mascotas desarrollen enfermedades graves que podrían poner en peligro su vida. Cuidar a un perro con diabetes puede resultar abrumadora. Esto se debe a que requiere que controle su nivel de azúcar en sangre con regularidad, que le administre la cantidad adecuada de insulina y que se asegure de que se alimenta correctamente con la dieta adecuada. Si introduce algún cambio en estos factores, podría afectar negativamente a la salud de su perro. Para prevenir el riesgo de una emergencia, es importante que administre insulina a su perro según las indicaciones de su veterinario. Para reducir el riesgo de doble dosificación, es importante que 1 persona se encargue de administrar la insulina a su perro diabético.
Síntomas de sobredosis de insulina en perros
A veces puede producirse una sobredosis accidental de insulina. Esto puede requerir que su mascota sea llevada a un tratamiento de emergencia. Hipoglucemia es el efecto más común de la sobredosis de insulina en perros. La hipoglucemia es un problema de salud grave que se produce cuando el nivel de azúcar en sangre del perro desciende demasiado. Inicialmente, la hipoglucemia puede provocar síntomas como letargo, somnolencia, ansiedad y hambre, que pueden ir seguidos de convulsiones, contracciones musculares, coma o muerte. Es importante que sea capaz de notar estos síntomas de hipoglucemia, para que pueda tomar las medidas necesarias para evitar que empeore. Si su perro diabético es capaz de comer, puede alimentarlo con comida que contenga carbohidratos y después debe llevarlo a un hospital de animales cercano para que reciba tratamiento de urgencia.
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