Relación entre la diabetes y el sistema endocrino
El páncreas, que desempeña un papel esencial en la producción de insulina, forma parte del sistema endocrino. Una serie de complicaciones como azúcar alta en sangre y la diabetes pueden desarrollarse cuando las glándulas pancreáticas no liberan la cantidad necesaria de insulina.
¿Cuál es la relación entre la diabetes y el sistema endocrino? En primer lugar, profundicemos en la definición del sistema endocrino, su funcionamiento y los procesos corporales que engloba. A continuación, estableceremos el vínculo entre la diabetes y el sistema endocrino.
¿Qué es el sistema endocrino?
El sistema endocrino es una red de órganos y glándulas situados en distintas partes del cuerpo. Controla y gestiona diversos procesos corporales en los que intervienen hormonas. Algunos ejemplos de estas funciones corporales son los siguientes:
- Apetito
- Función sexual
- Reproducción
- Temperatura corporal
- Metabolismo
- Tensión arterial
- Para dormir
- Crecimiento
- Frecuencia cardiaca
¿Cómo funciona?
Utiliza hormonas para ejecutar las funciones corporales mencionadas. Estas hormonas son producto de varias glándulas del cuerpo y dirigen el funcionamiento de órganos y tejidos.
Las glándulas y hormonas del sistema endocrino comparten un objetivo común: mantener el equilibrio de la ecología corporal. El sistema también colabora con los sistemas nervioso e inmunitario para responder a los estímulos externos y mantener el organismo bien estabilizado.
El sistema endocrino y la diabetes
¿Cómo funciona el páncreas?
Imagine que come algo: una fruta o simplemente una comida típica del día. Durante el proceso de digestión, el páncreas segrega insulina para ayudar a la glucosa a entrar en las células y convertirla en energía. La energía se almacena para su uso diario o para el futuro. En otras palabras, la insulina que produce el páncreas ayuda a estabilizar los niveles de azúcar en sangre.
Sin embargo, si el páncreas no libera suficiente insulina, los niveles de glucosa en sangre aumentan de forma anormal. Esto acaba provocando resistencia a la insulina, que es la causa principal de la diabetes. Por eso son necesarias inyecciones diarias de insulina o medicamentos orales para equilibrar y controlar la diabetes.
Existen dos tipos principales de diabetes - tipo 1 y el tipo 2. Ambas afecciones están relacionadas con el mal funcionamiento de la producción de insulina. Esto es lo que establece un vínculo entre la diabetes y el sistema endocrino.
En la diabetes tipo 1, el organismo ataca a su propio sistema endocrino, concretamente a la glándula que produce la insulina, el páncreas. El resultado es que el páncreas se vuelve incapaz de producir insulina para equilibrar la cantidad de glucosa que ingiere el organismo.
Por otro lado, diabetes tipo 2 comienza con la resistencia a la insulina. Se define como la incapacidad del páncreas o del organismo para utilizar y producir la insulina que estabiliza la cantidad de azúcar que entra en el cuerpo.
El principal tratamiento para los diabéticos de tipo 1 consiste en inyecciones diarias de insulina. Esto les ayudará a controlar su enfermedad y su nivel de glucosa en sangre. Por otra parte, a los diabéticos de tipo 2 les resulta más fácil controlar la diabetes haciendo ejercicio con regularidad y siguiendo una dieta sana. Además, se les aconseja que tomen medicamentos orales contra la diabetes para asegurarse de que sus niveles de azúcar en sangre están dentro de los límites normales.
Recomendación del médico
Para los diabéticos de tipo 2, una dieta cetogénica y el ejercicio, junto con la tranquilidad de la intervención farmacológica de Ozempic y Metformina, pueden mejorar significativamente el tratamiento de la enfermedad. Esta combinación de intervenciones puede prevenir la manifestación clínica del aumento de la mortalidad en la mayoría de los casos y, a menudo, evitar la dependencia de la insulina.