¿Qué es la resistencia a la insulina?
La resistencia a la insulina (RI) es una afección médica en la que las células del organismo desarrollan una resistencia a los efectos de la insulina. En otras palabras, se produce una respuesta reducida a una cantidad determinada de insulina. Por lo tanto, se requiere una cantidad de insulina superior a la habitual para generar suficientes efectos hipoglucemiantes. En consecuencia, el páncreas aumenta su producción de insulina para compensar esta resistencia. La IR suele tener una causa exógena (por ejemplo, inyecciones de insulina) o endógena (por ejemplo, la insulina natural del organismo).
Medicamentos para el tratamiento de la resistencia a la insulina
Independientemente de la causa, resistencia a la insulina puede tratarse modificando el estilo de vida, especialmente con ejercicio y pérdida de peso. También se sabe que los cambios en la dieta mejoran la IR. Al mismo tiempo, dejar de fumar puede ayudar a controlar la IR, ya que el tabaquismo es un factor de riesgo de IR. Los tratamientos no farmacológicos son capaces de restablecer la capacidad del organismo para responder a la insulina con normalidad, al tiempo que mejoran el bienestar general.
En algunos casos, los médicos pueden recetar medicamentos para tratar la resistencia a la insulina. En la actualidad, no existe ningún medicamento aprobado por la FDA para el tratamiento de la IR. Sin embargo, algunos de los medicamentos recetados que están indicados originalmente para la diabetes de tipo II pueden ayudar a restablecer la respuesta normal del organismo a la insulina y reducir los niveles de azúcar en sangre. Existen principalmente dos grupos de fármacos que tienen efectos beneficiosos sobre la respuesta a la insulina de los músculos y tejidos: tiazolidinedionas y biguanidas. La metformina es un tipo de biguanida que ayuda a reducir el riesgo de progresión a diabetes, aunque no es tan eficaz como las intervenciones no farmacológicas, como el ejercicio y la pérdida de peso. Inhibidores de la alfa-glucosidasaque actúan por un mecanismo diferente, también se utilizan para retrasar o restringir la absorción de hidratos de carbono después de las comidas. Esto ayuda a evitar un aumento repentino de niveles de azúcar en sangre. Se pueden prescribir otros fármacos contra la resistencia a la insulina para potenciar la síntesis de insulina. Se cree que estos fármacos, que incluyen las meglitinidas y las sulfonilureas, tienen una acción directa sobre el páncreas.
Además, suplementos como el cromo, el magnesio, el ácido alfa-lipoico y la coenzima Q10 (CoQ10) parecen tener un efecto positivo sobre la resistencia a la insulina.
Recomendación del médico
El control de la resistencia a la insulina implica realizar cambios saludables en el estilo de vida y tomar regularmente la medicación prescrita. Esto incluye elegir las comidas y los tentempiés adecuados, leer las etiquetas nutricionales y trabajar para mantener un peso saludable. También son fundamentales el ejercicio físico regular y el cumplimiento de los horarios de medicación.
Preguntas para su médico:
- ¿La resistencia a la insulina conduce siempre a la diabetes?
- ¿Pueden unos hábitos alimentarios saludables a edades tempranas prevenir la resistencia a la insulina?
- ¿Pueden las personas delgadas desarrollar resistencia a la insulina?
- ¿La resistencia a la insulina dificultará la pérdida de peso?